* Los bebés amamantados sufren menos enfermedades respiratorias y gastrointestinales que los alimentados con leche no materna.
* Los bebés alimentados del seno materno son menos propensos a alergias, asma y cólicos.
* La leche materna siempre tiene la temperatura adecuada.
* Según estudios recientes, las mujeres que amamantan a sus hijos, corren menos riesgo de desarrollar cáncer mamario premenopáusico.